lunes, 2 de febrero de 2009

Cuando vemos imágenes así nos damos cuenta de que algo anda mal,muy mal.

El día que mis hijos y los niños que aparecen aquí tengan las mismas oportunidades en común entonces el mundo será un lugar ideal para vivir. Mientras,no.












¡Culpable soy por nacer en Africa!

No pedí nacer, sólo sé que nací
en una gran tierra llena de exuberante belleza,
de grandes misterios y valiosos tesoros,
donde la desigualdad hace que la tierra llore de tristeza,
llore lagrimas de sangre, la sangre que llevo por mis venas
esa misma tierra que me vió nacer, la que me verá morir,
¡aún antes de poder decir que tuve oportunidad de vivir!.

Oportunidad de soñar…Soñar?
Acaso son los sueños que no puedo tener,
porque el dolor causado por el hambre, la sed estremecen mí ser,
mí cuerpo y no me permiten descansar, mucho menos dormir
y para mí soñar prohibido está , ¿para que fingir?
si para mí las oportunidades limitadas están,
me lo recuerdan mis entrañas,
con sus dolorosas punzadas y el constante sufrir.

Reír…Díganme, ¿quién sufriendo,
padeciendo tantas necesidades puede sentirse feliz?,
¿Quién viviendo así?
¡No soy culpable de haber nacido aquí!, no lo pedí.

Futuro…¿Cuál futuro? Mi futuro es como
el de una tierra estéril, donde la semilla muere
al sentir su calor sobre ella, sin posibilidades,
sin oportunidad de germinar,
sin ilusiones viviendo una triste realidad.

Esperanza… Es sólo una hermosa palabra,
para el que la pueda tener,
para aquel que algún día la pueda llegar a ver
la mía está escrita, con tinta de sangre, de dolores, de injusticias
de desprecios, de necesidades, de barbaries, de sufrimientos,
de carencia de alimentos,
sin techo seguro, sin una frazada,
sin rumbo fijo, sin ilusiones, ni lunas mis madrugadas.

Con la abundancia de la pobreza y las huellas del dolor,
con la lagrima de sangre que de mis ojos brotó,
y no fue roja, sino negra su color,
está escrita mí biografía, la biografía de miles de niños,
hombres y mujeres que tan lejos y tan cerca estamos de ustedes,
de los ricos, de los poderosos, de los gobernantes ambiciosos,
de los políticos idealistas, de las grandes y acaudaladas naciones,
de las poderosas iglesias,
todos ofrecen discursos para la situación mejorar,
mientras son incapaces de compartir su pan,
y en solo promesas se han de quedar.

Será que han olvidado que la Biblia dice que somos hermanos,
Que fuimos creados por un mismo Dios,
¿Hermano de un negrito desnutrido o del que a causa de la
pobreza y enfermedades murió?

¿Será esto cierto, tendrán acaso la razón?
¡No busques en libros respuesta, ya que está dentro de tú corazón!.

Mientras estés de brazos cruzados, serás cómplice de miles de muertes.
¡Haz algo, ya es tiempo de unirnos y cooperar!, hoy es por ellos,
¿Quién sabe si en un futuro alguien lo haga por nosotros?

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